Debate militante en Sarandí: ¿Cómo salir del desastre económico? ¿Qué otro camino es posible?

Vecinos y vecinas de Sarandí se encontraron en la Unidad Básica Roberto Jorge Berrozpe, ubicada en Sarandí, para debatir sobre cómo salir de la difícil situación que atraviesan las familias trabajadoras, comerciantes y pymes de la ciudad. Participó el economista Horacio Rovelli. Participaron el economista Horacio Rovelli y el dirigente bancario Eduardo Berrozpe, entre otros. 


 

«¿Cómo salir del desastre?«, fue la pregunta disparadora de un debate que se llevó a cabo en la Unidad Básica Roberto Berrozpe, ubicada en la avenida Belgrano al 2900 en Sarandí, en donde hubo diversas reflexiones y propuestas para revertir el modelo económico que lleva adelante el gobierno de Javier Milei.

Caída del poder adquisitivo y del consumo que impactan en la actividad, cierre de fuentes de trabajo y pérdida de empleos es el escenario que atraviesa la economía argentina en el actual período.

«Nos reunimos para escucharnos, para preguntarnos cómo salimos de este desastre” coincidieron Luis Berrozpe y María Luberiaga a partir del cual se abrió un intercambio entre los presentes en donde hubo un relatos de baja de ventas y una descripción del deterioro económico y social.

Dentro de los testimonios, uno de ellos fue del dueño de un puesto de diarios que describió una abrupta caída en las ventas de 300 a 100 ejemplares los días domingos. Por otro lado, la encargada de una farmacia contando como se acercan jubilados a los que no les alcanza el dinero para comprar medicamentos, comerciantes que bajaron sus persianas ante la caída de las ventas así proveedores de insumos para la salud y la industria que vieron una drástica caída de la demanda.

EL SIDERAL ENDEUDAMIENTO EXTERNO, LAS PROPUESTAS PARA SALIR DEL DESASTRE

El reconocido economista Horacio Rovelli profundizó en el análisis económico detallando cuáles son los condicionantes de la economía argentina, la gravedad e ilegalidad del endeudamiento externo repasando el contraído durante la presidencia de Mauricio Macri hasta el presente con Javier Milei.

Precisó que la deuda bruta de la Administración Nacional a diciembre de 2015 era de 240.665 millones de dólares (el 52,6% del Producto Interno), y al 31 de marzo de 2025 asciende a 473.557 millones de dólares (94,7% del PIB). Destacando que el gobierno de Javier Milei ha incrementado la deuda en 102.883 millones de dólares en sólo quince meses de gestión.

«Es necesario que rindan cuentas sobre ellos en qué se gastaron», apuntó Rovelli. También señaló que dicho endeudamiento beneficia a los grandes fondos de inversión especulativos que buscan garantizar el cobro con pautas que condicionan la urgente necesidad de aplicar la mayor cantidad de recursos en la situación de emergencia nuestra sociedad.

Esas pautas, agregó el economista, «favorecen a tanto a países como corporaciones que ansían apropiarse de nuestros recursos naturales estratégicos y empresas estatales como el Banco Nación o Aguas Sanitarias. En esos Fondos de Inversión – como Black Rock o Templeton – influyen decididamente en gobiernos como los de EEUU, donde los representa el Secretario del Tesoro, Scott Bessent, que recientemente vino a respaldar a Milei, o el de Argentina donde los representan el Ministro Luis Caputo y el Presidente del Banco Central, Santiago Bausili, los tres con intereses en esas grandes corporaciones financieras en su actividad privada».

En otra intervención, el dirigente bancario Eduardo Berrozpe, agregó que el «brutal ajuste que sufren jubilados, familias trabajadoras junto a la caída del consumo y la actividad, genera una menor recaudación fiscal» tras lo cual sumó: «los recortes presupuestarios que afectan los servicios públicos, la suspensión de las transferencias obligatorias del Gobierno nacional a las Provincias y, por consiguiente, a los municipios».

Seguidamente recordó que no se debe olvidar el otro gran condicionante de los gobiernos de los últimos 50 años: «las grandes corporaciones empresarias que fijan precios a los alimentos, la energía, e insumos industriales, donde confluyen la voracidad de ganar siempre más no importa cómo, con el interés de los Fondos de inversión y del Fondo Monetario de que se exporte para tener divisas para pagar la deuda. Si hay argentinas y argentinos no comen, no importa».

Asimismo, Luis Berrozpe, en otra intervención, destacó la gestión de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires y de Jorge Ferraresi en Avellaneda «que necesitan y merecen todo nuestro respaldo, pero sabiendo que si no se cambia esta política económica de Javier Milei, lo que en parte depende de los resultados de las elecciones de este año y de que nos movilicemos no hay ni presente ni futuro para todos».

Sobre el final de la reunión tanto Horacio Rovelli como Eduardo Berrozpe, señalaron que hay otro camino para la economía nacional para el que es necesario aunar las fuerzas de quienes sufrimos las consecuencias, comenzando por los sectores que integran nuestro mercado interno alrededor de un plan común para lograr la transformación productiva de nuestro país.

Coincidieron que deben comenzarse por responder a la emergencia que vivimos con las siguientes medidas:

  • Recomponer los ingresos de los trabajadores y los jubilados, pues son necesarios para la vida y para garantizar la demanda en el mercado interno.
  • Desacoplar los precios internos de los mundiales. Administrar los precios de los consumos para vivir y de los insumos para producir.
  • Regular las exportaciones e importaciones, para que las divisas – dólares- que ingresan respalden la recuperación del trabajo y las actividades productivas.
  • Aplicar un impuesto a las grandes fortunas a quienes se beneficiaron y se benefician de la bicicleta financiera sostenida por los dólares obtenidos con los acuerdos con el Fondo.
  • Exigir al Fondo Monetario y la justicia la revisión de los prestamos fraudulentamente otorgados a los Gobiernos de Mauricio Macri y de Javier Milei, que no se deben ni se pueden pagar, ya que fueron contraídos por motivos electorales, violentando la legislación nacional y la normativa del Fondo Monetario Internacional.
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