Las principales problemáticas, el resguardo de las infancias en situaciones conflictivas y las habilidades en una rama del derecho que aborda temas muy sensibles. La mirada de la jueza Maite Herrán y el actual consejero de Familia y próximamente juez, Marcelo Cardoso.
En la última edición del programa «Se Hará Justicia», conducido por la Dra. Verónica Ottaviano, visitaron el estudio la Dra. Maite Herrán, jueza del Juzgado de Familia N° 5 de La Matanza y el Dr. Marcelo Cardoso, consejero del Juzgado de Familia N° 4 y próximamente juez ya que recientemente ha sido votado su pliego en el Senado bonaerense y espera designación formal.
En esta ocasión, el diálogo con ambos funcionarios judiciales fue alrededor de las principales problemáticas que se les presentan y abordan los juzgados de familia. Cómo lidiar con tema tan sensibles, cómo cuidar a las infancias, cuáles son los derechos de los niños, los procesos de adopción, qué habilidades son necesarias para una cuestión que tiene que ver con lo judicial, pero también con lo humano.
Para comenzar el diálogo Maite Herrán visibilizó un problema que alcanza a toda la Justicia bonaerense como es la gran cantidad de vacancias que existen al demorarse los procesos para los nombramientos de jueces, fiscales, defensores. «Esa situación nos tiene muy recargados a todos. Es hora que se ocupen la sillas para que la gente tenga el servicio de justicia que merece«, afirmó.
Las problemáticas alrededor del derecho de familia abarcan desde disputas por la tenencia de los hijos e hijas, situaciones de violencia de género o maltrato a los niños y adopción, entre los principales temas.
Respecto a los conflictos familiares, Herrán describió: «los acuerdos se logran cuando cada una de las partes deja alguna de sus pretensiones. Salir del conflicto va a implicar un trabajo desde el juzgado, pero también con la voluntad de los abogados«.
Respecto a la resolución de esos conflictos enfatizó: «No solo tiene que ver con el derecho, tiene que ver con habilidades blandas. Se trata con situaciones emocionales muy delicadas. Tenemos que aplicar nuestros saberes y las personas tienen que hacer su parte».
Sobre el tema, Cardoso agregó: «Nuestro trabajo es recomponer situaciones, por ejemplo en casos de separaciones».
Acerca del rol del funcionario judicial expresó: «Con familia tenés que renunciar a tu manera de ver las cosas. Cada familia tiene sus propios cánones y costumbres que en muchos casos funcionaba bien de una manera hasta que dejó de hacerlo. Cada familia tiene su propio universo con cosas buenas y algunas que no lo son. La mirada del Estado entra cuando hay una crisis e interviene para ser garante».
Sobre el rol puntual como Consejero indicó: «La idea es trabajar en la autocomposición, desde la reforma del código civil está en un artículo específico. Cuando una familia se rompe, el objetivo es que de alguna manera se restituya el vínculo«.
«Es una etapa previa a la confrontación. Los abogados deben aportar mucho en esa instancia en donde no hay ganadores ni perdedores», completó.
Respecto a temas puntuales que involucran a niños, Herrán subrayó: «El interés superior del niño tiene que ser valorado en concreto y hay fallos que marcan que cuando se enfrentan el derecho de un niño versus el de un adulto siempre tiene que primar los derechos de los niños».
Un tema de enorme complejidad es el que se abre con los procesos de adopción. Allí Herrán destacó: «Cuando tenemos que definir la adoptabilidad es lo más difícil, agotamos y reagotamos que por todas las vías la restitución de los derechos en familia que es lo que mandan los tratados y el Código Civil. Pero también pasa el tiempo para los niños y hay que decidir«.
«El apartamiento de la familia de origen se da cuando hay una situación extrema. La autoridad administrativa va a intentar todo lo posible por sostener el vínculo con la familia extensa o referentes afectivos. Cuando llegamos a la institucionalización es porque ha fracaso todo lo previo. Es muy doloroso en muchos casos escuchar lo que los niños nos cuentan», detalló.
«En la Justicia de la Provincia contamos con equipos técnicos que incluyen psicólogos, trabajadores sociales que tienen una intervención desde su disciplina e incumbencia y también hay consejeros de familia dentro del Juzgado. El objetivo siempre es ver la mejor manera de encaminar la situación de los niños», agregó Herrán.
Por último, un tema que se abordó en la entrevista fue la violencia digital. Herrán basó un falló meses atrás en la ley Olimpia sancionada en 2023 que aborda la violencia digital contra mujeres en entornos digitales. Una ley que lleva ese nombre en homenaje a la mexicana Olimpia Coral Melo, que fue la cara visible de una lucha en México que traspasó fronteras.
«Es necesario pensar en una alfabetización digital, se puede denunciar los contenidos inapropiados para que las plataformas tomen nota. Si alguien sufre violencia no hay que borrar el registro hasta que se acreditar. También mencionar que las redes sociales tienen botones para denunciar contenidos violentos o agraviantes», cerró Herrán.