Máximo Kirchner fue el protagonista de un acto en el microestadio de Talleres de Remedios de Escalada que compartió con el intendente de Lanús, Julián Álvarez, y Edgardo Depetri. El acto se dio en medio de la escalada por la conducción del Partido Justicialista a nivel nacional para el cual se candidateó Cristina Kirchner y los cortocicuitos con el gobernador Axel Kicillof.
El tablero político del Partido Justicialista está en movimiento. A nivel nacional con la candidatura de Cristina Kirchner y con la prefiguración del escenario electoral para 2025.
«Hay que construir una fuerza política para tener las manos necesarias para poder frenar a este Gobierno. Tenemos que construir una opción y dejar de hacer demagogia. Una opción que le de a la gente un cachito de ilusión”, expresó Máximo Kirchner en el gimnasio de Talleres de Remedios de Escalada junto a Julián Álvarez y Edgardo Depetri y a militancia. También dio el presente la jefa comunal de Quilmes, Mayra Mendoza.
Es la tercer acto que realiza en las últimas semanas el también presidente del Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires. Uno fue en el gimnasio del club Atenas de La Plata y el otro en Monte Hermoso junto a intendentes.
“Necesitamos mayorías que después no se desintegren al primer cimbronazo o ante los aprietes. La unidad del frente nacional es necesaria, pero tenemos que entender que la consistencia de esa unidad en estos tiempos de liquidez es necesaria, de lo contrario volveremos a generar una nueva frustración en nuestro pueblo”, afirmó.
“Seis de cada diez personas que viven en el conurbano son pobres, y entonces cuando un compañero quiere discutir un diputadito más o un diputadito menos en la lista me rompe soberanamente las pelotas. Algunos vivos quieren sembrar cizaña. En todo caso no le gustarán los nombres pero los que están en diputados han votado sin desteñirse. Alguno querrá cambiar algún nombre pero esa es otra discusión”.
“El objetivo de cara a la elección de 2025 es construir una fuerza electoral que realmente, cuando el Presidente vete (una ley), tengamos las manos en el Congreso para poder frenarlo. No hay otra manera de hacerlo. O lo entendemos o lo entendemos, sino es engañar a la gente, frustrarla”, concluyó Máximo Kirchner.
