Cristina Fernández de Kirchner habló públicamente por primera vez desde que asumió Javier Milei como presidente. Fue en la inauguración del microestadio Presidente Néstor Kirchner ubicado en el Polideportivo Municipal Reinaldo Gorno (bulevar “Indio” Gómez y Lafinur, en Quilmes Oeste).
«Escuché al Presidente en una cadena nacional y la verdad que me decidí a venir acá, para reflexionar sobre este particular momento que vive la Argentina y esto que denominé el experimento anarcocapitalista y el inútil sacrificio al que está siendo sometido nuestro pueblo».
«Pero la verdad es que cuando escuché por ejemplo congratularse por el déficit público del primer trimestre y… bueno, resulta que no pagaste el CAMMESA, la energía, cuando no pagaste las obras públicas, no pagaste lo que le debés a las provincias, no pagaste lo que le debés a las universidades… Es como si ustedes en su casa, después de no haber pagado la luz, el gas, el agua, las expensas, el alquiler, la señora que trabaja, la niñera, digan “tengo superávit”. No hermano, no tenés un superávit. No es cierto. No es cierto. Mirá todo lo que debés, ¿superávit de dónde? No. No tenés superávit. Este superávit que no tiene sustento y que, además, plantea al déficit fiscal».
«Quiero también ser muy clara: nadie está desconociendo la legitimidad de origen del Presidente eh… si hay algo que siempre he reconocido es la contundencia y lo inapelable que es el voto popular. Nadie está discutiendo, pero la legitimidad de origen necesita legitimarse también en la gestión y en los resultados de la gestión».
«Entonces uno se pregunta, bueno, pero si no es neoliberal, que es entonces el anarcocapitalismo. Y ahora acá, creo que sí hay una pista en el discurso del presidente en la cadena nacional del lunes. Él dijo el lunes que la recuperación y el crecimiento van a venir desde 4 lugares. Petróleo, gas, minería y el campo. O sea, la agricultura. O sea, es un sector que tiene un crecimiento como acabo de señalar en Vaca Muerta pero que tal como está desarrollado en nuestro país nos preanuncia una economía de carácter extractivista. O sea, llevarse todos los recursos naturales sin valor agregado, sin tecnología, sin industrialización. O sea, pre capitalista. Porque me hace acordar a la Argentina del virreinato del Río de la Plata, donde se llevaban todas las riquezas y no te quedaba nada».
«Este el gran drama que se va a avecinar y que el presidente debe comprender. El presidente tiene que comprender que debe dar un golpe de timón a esta política. Esto del mercado no tiene fallos. Del que hay que dejarlo todo sin regulación. Qué pasó con las prepagas. Tuvo que recoger línea y mandarse para atrás. Y no resolvió nada. Porque lo que debió haber hecho es al haber advertido lo que estaba pasando dejar sin efecto con un DNU la parte pertinente de prepagas en el otro decreto y retomar la capacidad del Estado para regular el precio de las prepagas que fue una capacidad que establecimos nosotros a fines del gobierno, del primer gobierno nuestro, mío, en el 2011».
«Pero entonces cuál es el problema de este presidente que dice que el estado no tiene fallos, que los empresarios son héroes, aun los que…el problema que tiene es que es muy dogmático., entonces él quiere acomodar la cabeza al sombrero. No presidente, cuando el sombrero no achique la cabeza, agrande el sombrero. Es por ahí. Es por ahí. Y si lo hace lo vamos a ayudar porque nadie quiere que le vaya mal. Porque si le va mal a ud. Le va a mal a todos los argentinos. Mire, se lo digo totalmente descarnada, pero también quiero que sepa, presidente, que si quieren convertir de vuelta a la Argentina en un país donde se extraigan todas sus riquezas, donde no haya industrias, donde quieran ponernos una suerte de eliminación de toda la clase media, bueno mire, ahí me voy a declarar avatar, de color celeste y azul, hombres y mujeres de color celeste y azul como la bandera para defender a la patria. A nosotros de colonia otra vez, no. Avatares. Otra vez no. De colonia otra vez no.
«Bueno, ¿y por qué la gente nos eligió en aquel 2019? Muy simple, porque se acordaba como habían estado hasta el 2015. Claro. Por eso, se ganó. El problema fue cuando alguno pensó que era por buenos modales que nos habían votado. Y no fue así. Entonces cuando vos crees que fue por los buenos modales y que todo lo otro hay que dejarlo de lado. Y bueno, terminamos como terminamos. Me hago cargo también, de todo como me hecho cargo toda la vida. No le echo el bulto a nadie ni a nadie. Pero voy de frente. No soy de las que tira la piedra y esconde la mano. No, no, no. Me hago cargo de todo. Creo entonces que es un primer aprendizaje. No eran los modales, nos votaron porque querían volver a tener calidad de vida y una vida organizada. Ni siquiera gran calidad de vida. Una vida organizada, ¿no? Donde los chicos van al colegio, comen en la casa, el viejo tiene trabajo, la vieja también, van al colegio, tienen clase todos los días…y una segunda cosa que también es buena ahora, aunque parezca un contrasentido, que esto que hoy estamos viviendo también nos obliga a replantearnos y a repensar muchas cosas en algún momento lo intentamos, pero por varias cosas».