La Confederación General del Trabajo, la CTA de los Trabajadores, la CTA Autónoma y la Unión de los Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) marcharán este miércoles a Plaza Lavalle rechazando el mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) por el cual el Gobierno modifica y elimina más de 360 leyes.
La convocatoria es para las 12 hs. con la elección de Plaza Lavalle frente al Palacio de Tribunales con un mensaje para que el Poder Judicial declare la inconstitucionalidad del DNU y la suspensión de sus efectos. Es parte de una estrategia de la CGT que busca por tres medios que el DNU no se aplique: que el Poder Judicial declare su inconstitucionalidad, que el Congreso lo rechace en ambas cámaras y por medio de la protesta gremial.
El DNU firmado por Javier Milei y todo el Gabinete representa un «reseteo» de la economía argentina con cambios drásticos que incluyen una flexibilización laboral, el avance sobre la privatización de empresas del Estado, derogación de leyes que permiten controles sobre el mercado, habilita la compra de grandes extensiones de tierra por extranjeros entre múltiples medidas que benefician abiertamente al sector más concentrado de la economía.
Más allá del contenido, una de las críticas que recibe el DNU es que avanza sobre la potestad del Poder Legislativo, encargado de la elaboración y modificación de las leyes. Entre otros aspectos apuntan contra la constitucionalidad del mismo. El Gobierno justifica el mega DNU aduciendo una crisis económica terminal y que allí se funda la emergencia para el mismo.
La CGT acordó movilizar el jueves pasado en una reunión que se llevó a cabo en la sede de la UOCRA con presencia plena del Consejo Directivo. Ambas CTA y la UTEP se plegaron a la iniciativa rechazando el rumbo económico y el contenido del DNU. La convocatoria se prevé importante en su asistencia.
El día después en la CGT se realizará un Comité Central Confederal en donde se definirá un plan de lucha en rechazo al DNU que entre muchos aspectos extiende los períodos de contratación, modifica indemnizaciones a la baja, limita el derecho a huelga y a la protesta, favorece la tercerización laboral, pone en jaque a los Convenios Colectivos de Trabajo, limita el pago de horas extras, además de buscar desfinanciar a los gremios.
“El día jueves vamos a convocar a un Comité Central Confederal no solo para establecer una medida sino un plan de lucha cuyo objetivo central es que esté DNU quede sin efecto lo antes posible. Vamos a ir por la vía política, legal y sindical. El objetivo es voltear al DNU y esto va a pasar“, indicó días atrás Héctor Daer, uno de los titulares de la CGT.
“El gobierno desprecia a los laburantes como quedó demostrado en el DNU. Vamos a luchar en la calle y en la justicia para que caiga este DNU”, amplió Pablo Moyano, otro de los titulares de la CGT.
Por su lado, Héctor Amichetti, titular de la Federación Gráfica Bonaerense y referente de la Corriente Federal de Trabajadores de la CGT indicó: «se está cumpliendo lo que dijimos en la campaña, que esta fuerza política que llegó al gobierno ponía en cuestión el funcionamiento de las instituciones democráticas. Vamos a presentar el ámparo en la Justicia y una expresión en defensa de la democracia».
«Es muy importante la convocatoria al Comité Central Confederal porque allí estamos los más de 3000 sindicatos que integramos la CGT, las más de 200 confederaciones y 100 regionales. Seguramente lo que vamos a debatir no es una medida puntual como un paro general, sino fundamentalmente un plan de acción.
Por su lado, el Gobierno envió un mensaje provocativo sobre la movilización. El portavoz presidencial Manuel Adorni dijo en la conferencia de prensa matutina que ante la marcha que ante la marcha «sigue abierta la línea 134 para los que se sientan extorsionados para ir a movilizarse» y advirtió que el Gobierno usará «todas las medidas de disuasión» de que dispone, como el protocolo de orden público.
Javier Milei sumó que si el Congreso rechaza el DNU llamará «un plebiscito o consulta popular».
