Por Leonardo Martín
Emiliano «Dibu» Martínez: Figura clave de una jornada histórica. No le llegaron mucho, pero tuvo una atajada en el minuto final que fue un gol más. En los penales otra vez decisivo contuvo uno y aplicó la psicología para condicionar en otro que terminó desviado. No tuvo responsabilidad en el gol de jugada de Mbappé, en el primer penal estuvo muy cerca de contenerlo. En esa Copa del Mundo, el Dibu se metió en el historia grande del fútbol argentino.
Nahuel Molina: Muy buen rendimiento en un partido que le tocó marcar nada más y nada menos que a Mbappé. Esa responsibilidad lo contuvo en ofensiva. Fue reemplazado por Gonzalo Montiel.
Cristian Romero: Inolvidable partido del Cuti. Firme por arriba y por abajo. Bien para salir con la pelota. Sufrió un poco cuando se rompió el partido y pasó a ser de ida y vuelta. Un Mundial a la altura de lo que se esperaba.
Nicolás Otamendi: Otro partidazo. Bien por arriba, firme en la marca. Lo mismo que el Cuti, después del empate se hizo un partido más desafiante con mucho espacio ante rivales veloces. Cerró un Mundial tremendo.
Nicolás Tagliafico: Un partido conmovedor, con una entrega y corazón enormes. Firme en la marca, muy bien cortando en campo rival. Anuló a Dembelé.
Rodrigo De Paul: Partidazo, motor del equipo recuperando, presionando, manejando la pelota e integrándose en los circuitos de juego. En el segundo tiempo sintió el desgaste. Otro que pese a alguna duda inicial terminó haciendo una Copa brillante.
Enzo Fernández: Otro encuentro notable del que fue elegido como el mejor juvenil de la Copa. Excelente manejo de pelota, recuperación. La revelación total argentina para esta Copa.
Kevin Mac Allister: Hizo todo bien. Un Mundial y final consagratorios. Siempre entregando la pelota bien, asistencia en el gol de Di María, colaborando en la recuperación. Una revelación el rendimiento en una Copa en la cual se ganó la titularidad.
Lionel Messi: La foto que queríamos ver, el 10 levantando la Copa del Mundo, tocando el cielo con las manos. Otra vez decisivo, con dos goles y siempre con magia para tocar cada pelota. Messi entró definitivamente en la eternidad.
Angel Di María: Otra revancha de un jugador absolutamente desequilibrrante. Tuvo un primer tiempo extraordinario en el que le convirtieron el penal y donde marcó el segundo gol. La duda es si no estaba para continuar algunos minutos más, Scaloni decidió sacarlo a los 25 del segundo tiempo. Fideo, otro que se ganó un lugar en la historia grande del fútbol argentino.
Julián Alvarez: Pura entrega para ser el primer jugador argentina en la presión del rival. Siempre peligroso, buscando sociedades. Este Mundial también fue la consagración de Julián.
Los que ingresaron:
Germán Pezzella: Entró pocos minutos, para defender el resultado final, especialmente por su aporte en el juego áereo. Lamentablemente Francia empató, pero en una jugada de penal.
Marcos Acuña: Le tocó reemplazar a Di María, con la idea de Scaloni de tener un jugador con más retroceso, pero que también pueda aportar en ofensiva. Peleó y tuvo presencia en la banda en un momento difícil del partido.
Gonzalo Montiel: Convirtió un penal histórico, el del triunfo argentino. Otro al que le tocó entrar en el momento más difícil, con un Mbappé agrandado. Lucho e hizo algunos aportes en ofensiva, pero sin dudas lo más destacada es el penal con el que se ganó la posteridad.
Leandro Paredes: Entró para sumar en la mitad de la cancha cuando se venía Francia. Ganó y perdió.
Paulo Dybala: Ingresó pocos minutos, pero se hizo parte de los circuitos de juego. Le tocó ejecutar en la definición por penales y lo hizo bien.
Lautaro Martínez: Clave en el tercer gol de Messi. Tuvo un par a modo personal, pero le faltó puntería.
El técnico, Lionel Scaloni: Criticado y menospreciado cuando asumió. En silencio construyó una Selección que terminó ganando el Mundial y la Copa América con un altísimo nivel. Hoy acertó con el planteo inicial del partido con la inclusión de Di María en un dibujo 4 3 3. El primer tiempo fue brillante, apabulló a Francia. El equipo retrocedió en el segundo tiempo y volvió a tener un par de minutos fatales. Los cambios hoy no aportaron las soluciones que si tuvieron en otros partidos, pero que decir. Campeón del mundo, un privilegio que solo pueden alcanzar un puñado de técnicos.