Diego Milito anunció su renuncia como secretario técnico en Racing que se efectivizará a partir de diciembre. Expresó sus diferencias con la actual conducción del club, «no comparto el modelo ni las ideas del club del Presidente (Víctor Blanco)». Patea el tablero a un mes de las elecciones y a días de una trascendental definición con Flamengo por la Copa Libertadores.
«Tomé la decisión de no continuar a partir de la próxima gestión (…) sé que suena fuerte pero no es así, no tengo nada contra Víctor al cual entiendo que deja todo por el club. Simplemente tiene un modelo de club que no comparto, pero tiene la potestad como máxima autoridad».
«Quiero aclarar que esto no es de ahora. Viene desde hace un tiempo y lo he hablado en reiteradas oportunidades con él. Me involucré hace tres años para tratar de persuadir y mostrar un camino diferente, el de la profesionalización de un área fundamental como la deportiva donde creo que hemos sido exitosos con errores y virtudes con resultados a la vista. Siento que no he sido escuchado y por eso dejo el espacio para que pueda seguir con sus ideas».
Respecto a la información que circulaba de un enfrentamiento con otros integrantes de la Comisión Directiva señaló, «es falso que haya pedido que echaran a otros dirigentes, solo pedí que me dejen trabajar en paz y respetando los roles».
«Debemos discutir modelos, ideas y proyectos. Intente convencer al Presidente de romper con antiguas estructuras que están instaladas en el club desde hace mucho tiempo y dejar atrás viejas políticas de los años noventa de la chicana, desestabilización, operaciones que son autodestructivas e innecesarias para nuestro club».
«Yo pretendo otro club, el de la evolución, la tecnología, de equipos de trabajo, de la buena comunicación, vinculación con el mundo, del crecimiento de la infraestructura con un club competitivo que pelee cosas importantes, en donde la inversión no sea considerada un gasto».
«Siempre que estén dadas las condiciones ayudaré a Racing. Es mi deseo y proposito a la hora de volver.
