Lucas Pusineri fue presentado como el nuevo director técnico de Independiente en una conferencia de prensa junto a Hugo y Pablo Moyano, presidente y vicepresidente respectivamente. Firmó hasta diciembre de 2020.
No tiene pergaminos como técnico, apenas dirigió un par de años en el fútbol de Colombia donde tiene un ascenso de la B a la A con el Cúcuta. Pero Pusineri tiene ese inolvidable gol ante Boca por el Apertura 2002 que le permitió afirmar un título que se le escapaba. Dentro de la malaria de Independendiente en las últimas décadas ese gol cada día es más grande, ahí hay una 50% de la explicación de su contratación. El otro 40% es la otra malaria, la económica. No hay un peso del lado rojo de Avellaneda.
El 10% restante es la llegada del Profe Kohan, de paso en el rutilante Independiente de 2017, luego peleado con Ariel Holan. Kohan dejó una muy buena impresión por capacidad como preparador físico y el valor humano para llegar y motivar al plantel. Hoy el ánimo del plantel está en el subsuelo.
De 43 años, Pusineri tendrá un comienzo al que decirle complicado le queda corto. River, Boca, Rosario Central y Racing lo esperan en una seguidilla de partidos.
“Se cumple un sueño y esperemos trabajar todos para que esa misma química que hubo cuando yo estuve acá la podamos volver a lograr”, expresó.
“Cuando yo me fui de acá como futbolista, sabía que alguna vez iba a poder venir a esta institución de esta manera. Como siempre dije, los caminos en algún momento se iban a cruzar, y es hoy. Eso me pone muy feliz y vuelvo a agradecer la confianza que hay en mí y el consenso que uno tiene en la gente”, completó.