El presidente boliviano Evo Morales renunció esta tarde en medio de violentas protestas, motines policiales en su contra y un pedido de renuncia por parte de las Fuerzas Armadas. La medida se dio, además, tras que la Organización de Estados Americanos (OEA) difundiera un documento calificando que no era «posible garantizar» el resultado de las últimas elecciones presidenciales.
La escalada que comenzó el 20 de octubre pasado culminó en la renuncia de Evo Morales a la presidencia denunciado que hubo «un golpe de Estado Cívico Militar».
“Renuncio a mi cargo de presidente para que (Carlos) Mesa y (Luis Fernando) Camacho no sigan persiguiendo a dirigentes sociales”, dijo Morales a través de la televisión, aludiendo a los líderes opositores que convocaron protestas en su contra, desatadas el día siguiente de los comicios del 20 de octubre.
«Estoy renunciando para que mis compañeros no sean amedrentados y amenazados», agregó.
En sintonía, Morales pidió el fin de la violencia. “Venimos de ese pueblo que luchó contra la colonia. Esperamos desde esta noche no seguir viendo hermanos y hermanas heridos”, explicó. “Que no sigan quemando las casas de mis hermanos, que no hagan robar a las familias. ¿Cómo es posible que la policía boliviana haya abandonado a las familias?”, denunció.
Asimismo, también presentó la renuncia su vicepresidente Álvaro García Linera. “Vamos a estar siempre acompañando al pueblo boliviano. Gracias Álvaro por estos 13 años”.
Minutos antes del anuncio, los jefes de las Fuerzas Armadas y de la Policía de Bolivia pidieron al presidente que dejara su cargo en medio de protestas por su cuestionada reelección en los comicios del 20 de octubre en los que hubo irregularidades.
“Hemos vivido en la pobreza pensando como que nunca más haya pobreza (…) aprovecho para agradecer a las distintas organizaciones internacionales que acompañaron”, añadió Evo.
La escalada tuvo episodios muy violentos con ataques a gobernadores que responden a Evo. Incluso la hermana del ahora ex Presidente le incendiaron la casa el sábado. En las últimas horas la OEA difundió el resultado de la auditoria donde concluyó: «No es posible garantizar la integridad de los datos y dar certezas de los resultados» de las elecciones del 20 de octubre.
Una horas antes de la renuncia el jefe de las Fuerzas Armadas Williams Kaliman había hecho un pedido público: «Las FF.AA. comunican que ante la escalada de conflicto sugerimos al presidente de Estado que renuncie a su mandato permitiendo la pacificación y el mantenimiento de la estabilidad«.
Es todavía un enigma el destino de Evo Morales. En un principio, se barajó la posibilidad de que tenga como destino Argentina, pero fue desmentido.