Lanús cayó 1 a 0 ante Aldosivi en La Fortaleza en una tarde olvidable del Granate. Tras el encuentro el Kely Carboni renunció a su puesto como director técnico. El gol para el Tiburón lo marcó Matías Pisano.
El Granate cayó 1 a 0 ante Aldosivi en condición de local al cabo de un aceptable encuentro disputado en el estadio «Ciudad de Lanús-Néstor Díaz Pérez», en el marco de la tercera jornada de la Superliga.
Matías Pisano, a los 14 minutos del primer tiempo, anotó el tanto que le dio la victoria final al conjunto portuario.
Un local que venía golpeado por la derrota ante Atlético de Rafaela por la Copa Argentina no pudo revertir la tendencia a la baja en la que se encuentra y sólo sacó dos puntos de los nueve disputados hasta el momento.
Con un esquema de juego un tanto confuso que dispuso a Marcelino Moreno como armador y sin un número cinco clásico, el anfitrión empezó a perder la pulseada desde el mismo pitazo inicial del árbitro Diego Ceballos.
A partir del buen pie de Pisano, Christian Chávez e Iván Colman, el «Tiburón» comenzó a construir su victoria demostrando un aceitado funcionamiento que lo llevó a una temprana apertura del score.
Un desborde del habilidoso Chávez por izquierda derivó en una cesión a Pisano, quien remató provocando que Guillermo Sara ofreciera una floja respuesta y tuvo como consecuencia un innecesario rebote corto que terminó en la cabeza del mismo Pisano, que sólo tuvo que empujarla a la red.
Dicha conquista le otorgó a la formación marplatense la tranquilidad indispensable para dominar psicológicamente a un adversario que viene demostrando una notoria fragilidad táctica.
El cuestionado Ezequiel Carboni apeló a una constelación de delanteros en el segundo tiempo, pero siguió sin lograr el volumen de juego que permitiera abastecer a todos ellos, quienes finalmente terminaron superponiéndose en sus funciones.
Tal confusión estratégica favoreció a un Aldosivi bien plantado en defensa, lugar de la cancha donde sobresalieron Emiliano Amor y el moreno Jefferson Mena.