Dirigentes peronistas bonaerense de diferentes sectores mantuvieron distintas reuniones, el pasado jueves por la noche, con el objetivo de lograr la unidad entre el Frente Renovador y el kirchnerismo con vistas a armar un amplio frente en la provincia de Buenos Aires y a nivel nacional para derrotar a Cambiemos en las elecciones de 2019.
En Tigre, el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, se reunió con el diputado nacional por el Frente para la Victoria Fernando Espinoza y la intendenta kirchnerista de La Matanza, Verónica Magario.
En tanto, en la ciudad de Buenos Aires se encontraron los intendentes peronistas bonaerenses Gabriel Katopodis (San Martín), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Gustavo Menéndez (Merlo, titular del PJ bonaerense) y Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) con el diputado nacional del massismo Felipe Solá.
Durante la charla en un restaurante de Barrio Norte porteño, Solá recibió el visto bueno de los intendentes del PJ, que le propusieron ser uno de los candidatos a gobernador del «peronismo unido», y que mantienen una cordial relación con la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, según confiaron allegados a los jefes comunales.
En tanto, a unos 35 kilómetros de ahí, se reunían en el Centro de Operaciones de Tigre (COT) dos figuras del peronismo provincial que desde 2013 estaban distanciadas, porque Massa lideró el espacio que derrotaría al kirchnerismo en las elecciones legislativas, mientras que Espinoza fue siempre una de las caras visibles del kirchnerismo como referente de La Matanza, un bastión del peronismo afín a la ex presidenta Cristina Kirchner.
A pesar de los contextos diferentes, el contenido de ambos encuentros privados, que no fueron difundidos por las redes sociales, tuvieron coincidencias a la hora de hablar de la unidad; de evitar que el Gobierno divida al peronismo, de realizar una gran interna en las PASO del año próximo, y de buscar consensos en el Congreso en temas puntuales, como ocurrió en el caso de las tarifas de los servicios públicos.
Fuente: Télam